Sé que ha pasado mucho tiempo pero quería comentaros mi viaje a Anuga en octubre. No conocía la feria de antes aunque tenía mucho interés en visitarla desde hacía tiempo.
La imagen que te formas de algo está muy influenciada por tu propia experiencia y las expectativas que te habías formado anteriormente, por lo que la objetividad total no existe. (Bueno, sí existe, en este caso en concreto, serían los comentarios de una persona que nunca hubiese visitado una feria ni hubiese oído nada sobre alguna, pero no sé si esta opinión serviría de algo, la verdad.) De todas formas, voy a intentar ser lo más imparcial posible.
Existe un dilema, creo yo, Sial o Anuga, voy a la feria de Alemania o voy a la de Francia. Bueno, personalmente creo que una feria al año, que permita reunirte con todos tus clientes y algunos potenciales no sobra en alimentación. Otra cosa sería hablar de sectores de bienes industriales donde no hay tantas novedades anualmente.
Mi experiencia personal es que las ferias francesas son muy burocráticas en su preparación, con lo que al final se hace pesado preparar la participación, pero en general cuidan más la imagen y los expositores destacan más. Las ferias alemanas son más sencillas de preparar, pero son muy estrictas y tajantes en fechas y plazos. Dicho esto, ¿con cuál me quedaría? Pues a la hora de prepararla con la feria alemana, pero si fuera un visitante de Asia, por ejemplo, con el corazón en la mano debo decir que prefiero Francia, que te da la posibilidad de ver un poco de París, que, sintiéndolo mucho, es infinitamente más agradable que Dusseldorf y comes mejor.
Es algo que creo que debería cambiar en Anuga, la comida, resulta chocante que en una feria de alimentación la comida sea tan mala. Es el único punto a mejorar que le pongo a la feria, el transporte, los accesos, servicios para expositores y visitantes... todo me pareció excelente.
No me gustó la ubicación del pabellón español, porque estaba en un edificio al que entrabas, digamos, por el entresuelo: para ir a la planta baja (donde estaba España) bajabas y para ir al primer piso (donde estaba Italia) subías. Creo que es mejor estar arriba que abajo, pero esto es algo completamente personal.
Los expositores españoles con lo que pude hablar participaban en la feria por motivos muy distintos, mercado alemán, mercado internacional, un poco de todo y a ver qué sale, etc. Es una feria inmensa, el domingo para entrar estuve esperando más de media hora, y eso era sólo el domingo, por lo que pienso que el motivo "a ver a qué sale" no cuenta en este tipo de certamen. Aunque hay muchos visitantes de todo el mundo que vaya uno importantísimo deambulando por un pabellón de los nueve que hay, tope con la calle en la que está tu stand y frente a él abra los ojos y diga:
-¡Aceitunas! ¡Justo lo que buscaba!
Y te pregunte a ti y no a los 17 fabricantes de aceitunas que hay a tu alrededor... Admitámoslo, es muy improbable. Pero, oye, ocurre, y donde no te va a pasar nunca es si no participas en la feria y te quedas en casa. Simplemente digo, que éste no debería ser el principal motivo para exponer en un certamen de este tamaño. Hay que ir con un trabajo previo, teniendo muy claro a quién vas a ver y si, como plus, topas con nuevos compradores, distribuidores o agentes, pues mejor.
La participación no ha variado mucho con respecto a la pasada edición, os paso la infografía de las ferias europeas actualizada con los datos de Anuga de este año. A ver qué tal va la próxima edición de SIAL... Con Alimentaria me estoy planteando sacarla de la comparativa, no sé qué opináis vosotros.
Y a continuación unas cuantas fotos de Anuga.
¡Buen miércoles!
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